TELL MAGAZINE JUNIO 2024
42 tell. cl de los mejores jugadores que hemos tenido en Chile. Lo desafié en una partida rápida y, frente a la sorpresa de toda la federación, le gané. De ahí en adelante, siempre estaba dentro de los mejores e ingresé a la categoría de honor del club (1975), pero reconozco que, además del estudio, tenía facilidades y condiciones para el juego. ¿Qué se necesita para jugar ajedrez? Lo más importante es que te guste mucho; cuando haces las cosas con ganas y pasión, por supuesto, tienes más posibilidades y ese fue mi caso. A corta edad tuve la oportunidad de jugar contra Kaspárov, uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, incluido el primer campeonato del mundo en Francia (1976), donde empatamos. En ese tiempo eramás difícil poder viajar al extranjero… Mil veces más difícil, era todo más complicado, sobre todo desde Sudamérica. Yo tuve la suerte de representar a mi país, muy orgulloso, a los trece años, en el primer mundial. Fui tercero en el mundo en menores de veinte años, campeón panamericano juvenil, medallista olímpico. Enfrenté en match , dos veces, al vicecampeón del mundo Víktor Korchnói… aunque me ganó el primero, yo gané la revancha. Con Boris Spasski empatamos, con Anatoly Kárpov jugamos muchas veces, incluso llegué a ser su entrenador. Historias como esa te marcan toda la vida. Tuve la suerte de enfrentar a los grandes jugadores rusos y he estado con la elite del ajedrez mundial. Sin duda tu desafío más importante fue en el Torneo Internacional Categoría XVI de Las Palmas… Sí, fue el momento peak de mi carrera. En el año 1993 gané “el torneo más fuerte del mundo” en España, superando a los campeones Anand (India), Khalifman (Rusia) y Topalov (Bulgaria), entre otros grandes del ajedrez… hasta ahora he sido el único chileno en logarlo. Es más, hay muy pocos sudamericanos que han llegado a instancias como estas. Si bien hay jugadores que tienen el mismo o más talento que los europeos, tenemos menos oportunidades, federaciones más débiles, menos acceso a torneos internacionales. Hay menos apoyo… Sí, es menos popular el ajedrez, a pesar de que se juega en muchos colegios, hay menos clubes, organización, y también los torneos y prácticas magistrales se realizan en Europa, eso ya es una desventaja. Con Rusia, por ejemplo, nos enfrentamos a un país que da mucho apoyo económico a sus jugadores. Son fanáticos (a tal punto que lo utilizaron como herramienta política) y les otorgan incentivos desde que son niños. Pero esa falta de apoyo que hay en Chile, lamentablemente, ocurre en casi todos los deportes. “Gran parte de mi vida he tenido la fortuna de difundir el ajedrez, y uno de mis grandes aliados ha sido Soprole. Hace veintisiete años hacemos en conjunto Creo que la gran ventaja de la tecnología es que todos pueden estudiar por igual. Puedes mejorar, practicando todos los días, pero no es suficiente; el entrenamiento con piezas y en un tablero real, con un oponente humano no tiene comparación”.
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