TELL STGO OCTUBRE 2019

“ La fotografía ha sido parte de mi vida desde siempre. Al principio, como un espectador de grandes fotógrafos como Ansel Adams, Robert Doisneau, Sebastiao Salgado, André Kertés, y Robert Capa, de quien aprendí que si mis fotos no son lo suficientemente buenas, es porque no estaba lo suficientemente cerca. Debo de haber tenido unos diez años cuando hice mis primeros disparos en uno de los tantos viajes familiares, con la cámara de mi padre, el primer gran fotógrafo que conocí y quien me regaló mi primera cámara: una Canon A1 a los quince años y que se convirtió en una compañera inseparable. El poder detener el tiempo y dejarlo plasmado en una fotografía, donde lo importante era el instante más que la técnica, me llevó a recorrer distintos lugares, tratando de captar algo que me hiciera sentido. Un rincón, una mirada, una acción. Una historia. El proceso de revelado se hacía encerrado en un cuarto oscuro. Un romanticismo que fue transitan- do hacia la era digital, donde el menor costo y la posibilidad ilimitada de la fotografía, la fui integran- do con la naturaleza y las aves: mi otra pasión. La fotografía es esa oportunidad de lanzarme a la aventura, soñar con un lugar lejano para encontrar ese momento único e irrepetible. Por eso es que los fotógrafos de naturaleza podemos ir al mismo lugar muchas veces, porque siempre habrá opor- tunidades y aprendizajes nuevos.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDQ4NTc0